Dirigentes de la Fuerza del Pueblo en San Fco. de Macorís rechazan integrarse a la estructura provincial de la organización
San Francisco de Macorís.– Un grupo de reconocidos dirigentes de la Fuerza del Pueblo en San Francisco de Macorís anunció su decisión de no participar en la conformación de la estructura política provincial del partido, alegando prácticas excluyentes y control absoluto por parte de un sector interno.
En una carta abierta dirigida al presidente y demás miembros de la dirección provincial, los dirigentes Juan José Rosario, Wilton Alvarado, Juan Jesús de Peña, Avril Antonio y Juan Manuel Rosario denunciaron que un grupo dentro de la organización ha venido actuando de manera sectaria y manipuladora, controlando las plataformas de registro del padrón y las principales estructuras locales, lo que, según afirman, ha imposibilitado la participación plena y equitativa de los demás miembros.
“No vale la pena ser parte de esta estructura bajo un esquema de exclusión y manipulación, que ya ha demostrado no tener intención de cambiar su comportamiento”, expresa con firmeza la misiva.
Los firmantes recordaron los incidentes ocurridos el pasado 3 de agosto, cuando, según detallan, ese grupo utilizó su influencia para distorsionar el pasado proceso de elección interna, provocando serias frustraciones y desconfianza entre las bases del partido en la provincia Duarte.
Pese a su decisión, los dirigentes aclararon que mantendrán su lealtad al liderazgo del doctor Leonel Fernández y su compromiso con la Fuerza del Pueblo, reiterando que continuarán trabajando por el fortalecimiento del partido y la conquista del poder en las elecciones del 2028.
“Nuestra decisión no implica apartarnos del compromiso con Leonel Fernández ni con la Fuerza del Pueblo; simplemente nos negamos a legitimar un modelo de dirección excluyente que solo divide y debilita al partido”, puntualizaron.
La carta concluye reiterando su negativa a integrar tanto la estructura política provincial como el pleno responsable de escoger las diferentes posiciones de dirección, dejando claro su rechazo rotundo a lo que califican como un esquema viciado de favoritismo y manipulación interna.

